martes, 24 de junio de 2014

EMPRESA PÚBLICA

EMPRESA PÚBLICA

 
CONCEPTO UNO:
Se entiende por empresa pública, empresa estatal o sociedad estatal a toda aquella que es propiedad del Estado, sea éste nacional, municipal o de cualquier otro estrato administrativo, ya sea de un modo total o parcial. Sin embargo, la Unión Europea define a una empresa pública como cualquier empresa en la que los poderes públicos puedan ejercer, directa o indirectamente, una influencia dominante en razón de la propiedad, de la participación financiera o de las normas que las rigen.
Este concepto no se debe confundir con la "public company" estadounidense.
En el caso de propiedad parcial, el criterio para determinar si una empresa debe o no ser considerada pública no es tanto el porcentaje de acciones en poder del sector privado como el control efectivo que el Estado tenga sobre el proceso de toma de decisiones en la empresa. El elemento crucial en la empresa pública es la capacidad del Estado para ejercer presión política directa en la compañía. El accionista mayoritario es el Estado, con unos objetivos que pueden ser muy diversos y, lo que es más, cambiantes con el proceso político. En opinión de J.K. Galbraith, hay muchas y muy características similitudes entre las grandes empresas privadas y las grandes empresas públicas. Unas y otras, y ello es especialmente cierto en los sectores industriales y de servicios públicos, están cada vez más despersonalizadas y cada vez más burocratizadas.
La gran mayoría de los estados del mundo controlan empresas con diferentes fines -aparte del fin existencial de toda empresa de maximizar utilidades-, que pueden ser proveer servicios públicos, incentivar la producción del país o generar empleo, por nombrar algunos.
CONCEPTO DOS:
Empresa cuyo capital, en su totalidad o en su mayoría, es propiedad del Estado, de una Comunidad Autónoma o de una Corporación Local. Tienen también la consideración de empresas públicas las sociedades mercantiles con mayoría de capital privado cuya dirección y control es responsabilidad de los poderes públicos que tienen la facultad legal de nombrar la mayoría de los miembros de su Consejo de Administración. Por razones de interés general o bienestar social, la creación de empresas públicas en los diferentes países ha respondido a motivaciones diversas: provisión de bienes y servicios básicos para la sociedad, reforzar o suplir la falta de iniciativa privada en determinados sectores productivos, frenar la entrada de capital extranjero, desarrollar actividades capital-intensivas de elevado contenido tecnológico, resolver problemas a corto plazo no susceptibles de ser resueltos de otro modo, motivaciones ideológicas, etcétera. En la empresa pública se entremezclan dos preocupaciones fundamentales:
 
la consecución de los objetivos o propósitos públicos para los que fue creada, y

El logro de unos objetivos financieros o de mercado, como correspondería a cualquier empresa privada, y que precisamente por ello a la empresa pública se le dota generalmente de la forma jurídica mercantil.

La obtención del máximo beneficio o lucro no es, ni nunca lo ha sido, el principal objetivo de la empresa pública. Los fines u objetivos de la empresa pública se identifican con los del sector público: eficiencia asignativa, estabilidad y pleno empleo, crecimiento económico y redistribución de la renta. La administración de la empresa pública no debe desligarse nunca, sin embargo, del principio del máximo beneficio o lucro, dual del principio de economicidad, que no significa sino la consecución de unos determinados objetivos con el menor sacrificio o coste y que es consustancial con todo quehacer económico-empresarial. En la empresa pública el objetivo del máximo beneficio es un objetivo intermedio, supeditado siempre a la consecución de objetivos superiores.

Junto a las restricciones que en un orden económico de mercado configuran la actuación de cualquier tipo de empresa, en el caso de la pública hay que añadir las restricciones que se derivan de la intervención pública en defensa del interés general. Como la empresa pública se halla sometida a un mayor número de restricciones, para un mismo nivel o grado de eficiencia el valor de su óptimo económico (máximo beneficio, por ejemplo) será siempre inferior al de la privada, salvo que la correspondiente empresa pública perciba subvenciones o auxilios de naturaleza similar. De ahí que la eficiencia de la empresa pública no se pueda medir con criterios de mercado exclusivamente.
 
EJEMPLO DE EMPRESA PÚBLICA:
Las empresas públicas son negocios que se fundan con dinero y bienes del estado, lo que quiere decir que para que funcionen necesitan de recursos públicos, para generar ganancias que se destinan al bienestar de la ciudadanía.
Su actividad puede ser tanto en el sector básico o estratégico del país, así como de determinados servicios que beneficien a la población, por lo que no es necesario que éstas generen beneficios económicos.
Las empresas públicas son entidades institucionales que cuentan con su propia personalidad jurídica, que están constituidas con capital del estado y que tanto su gestión, como la toma de decisiones son por parte del gobierno.
10 ejemplos de empresas públicas:
1.    PEMEX
2.    AGROASEMEX
3.    CAPUFE
4.    Comisión Federal de Electricidad
5.    IMSS
6.    Lotería Nacional Para la Asistencia Pública
7.    Pronósticos Para la Asistencia Pública
8.    Instituto Nacional de las Bellas Artes
9.    Aeropuertos y Servicios Auxiliares
10.  Nacional Financiera